Trabajo especial No. 9 “Propuesta de evaluación del proyecto de intervención”.

La evaluación es un concepto que se le puede hallar en todos los aspectos de la vida humana. Su presencia es manifiesta en las profesiones y oficios, en las simples acciones, en ámbitos disciplinarios diversos sean objetivistas o subjetivistas, en la ciencia, en el arte, en la creación literaria que en la fabricación de automóviles, en nuestro estado anímico al levantarnos que en la valoración de una intensa jornada de trabajo, en el estado psíquico de los individuos que en la “normalidad” de nuestra mente. En todas ellas y muchas más, evaluamos nuestras acciones, nuestras palabras, nuestros sentimientos y prácticas, incluyendo la docente.
Posiblemente ninguna de ellas es tan vigilada, valorada y juzgada como la práctica docente. Aquellos tiempos en los que “ser maestro” era tan bien valorado por la sociedad han quedado atrás, en nuestro tiempo, ser maestro pareciera un lugar o un espacio en la “red” en la que cualquier ciudadano que quiera y pueda acceder a esta “red”, puede juzgar la práctica docente con solo escribirlo en su “ordenador”; con ello queremos decir que los maestros hoy más que nunca estamos expuestos de manera más abierta que antes al juicio de la sociedad. A ello han contribuido diversos factores, sin afán de abundar en ellos podríamos mencionar uno que es central: una insatisfacción profunda por los resultados de la educación.
En este inicio del siglo XXI, la educación ya no es como antaño un factor de movilidad social, en realidad pocos son los que todavía creen que la educación es un medio para ascender en la escala social. La desigualdad de los sistemas educativos del mundo ha demostrado que un porcentaje mínimo de la población mundial está lo suficientemente preparada en comparación con la gran mayoría que ha tenido que conformarse con una educación que escasamente le permite sobrevivir, adicionalmente la pobreza, el narcotráfico y el escaso desarrollo económico de los países capitalistas impactan fuertemente en las condiciones de vida de las personas convirtiendo las esperanzas de la gente en un circulo que cierra todas posibilidades pues en él se hallan esa educación precaria y condiciones económicas que no crean trabajo para profesionistas y no profesionistas.
Si bien las reformas educativas pretenden dar solución a esta y otras problemáticas de la educación y del progreso económico de los pueblos, los cambios en la educación pueden tener mejores oportunidades de mejorar las condiciones de la gente, en este sentido es que el proyecto de intervención “La construcción de la planeación didáctica en la escuela secundaria a partir de un modelo de gestión colaborativo de formación docente”, pretende contribuir a mejorar las condiciones expuestas.
Desde el principio se ha señalado la presencia de la evaluación en varios ámbitos de la vida humana. Este proyecto por supuesto no queda excluido, sobre todo si tuviéramos que contestar un cuestionamiento básico ¿Qué se evalúa, por que se evalúa y para que se evalúa en un proyecto de intervención como este?
Como un principio básico es necesario definir la evaluación como aquel proceso que “en las formas cualitativas de investigación se genera un tipo de conocimiento de carácter teórico y práctico que se construye de forma permanente. Cuando esta investigación se realiza por un docente a partir de su propia experiencia en el aula, es necesariamente autorreflexiva, autoevaluativa y autocritica. Esta sistematización de los procesos educativos construye poco a poco una teoría en la que se apoya el docente para comprender mejor lo que sucede en su práctica profesional y se convierte en materia de comunicación con sus colegas” (Carbajosa, 2011:371) y sobretodo puede contribuir a su formación en un sentido amplio que le permita ser un mejor ser humano y un mejor docente.
Siguiendo la idea de Carbajosa, la evaluación del proyecto de intervención relaciona los siguientes aspectos: 1) En la investigación cualitativa como es el caso de este proyecto, los docentes participantes pueden generar un tipo de conocimiento teórico y práctico; 2) La investigación que se realizaría a partir de este proyecto cuyo eje central es el trabajo colaborativo las experiencias para los docentes implicados serian la autorreflexión, autoevaluación y autocritica de sus propias practicas; 3) La sistematización de la experiencia del proyecto permitiría la construcción de teoría que le permita comprender mejor su práctica docente, 4) el proyecto puede en 2 sentidos promover la comunicación entre los docentes, en tanto se realiza la sistematización de la experiencia que incluye desde luego que los docentes analicen y compartan su experiencia al respecto pero además por que el mismo proyecto implica que la colaboración docente no puede existir al margen de la comunicación, por eso afirma Díaz barriga retomando la idea de los hermanos Johnson que el aprendizaje cooperativo se puede entender como: la interdependencia positiva, la interacción promocional cara a cara, la responsabilidad y evaluación personal del aprendizaje de los integrantes, el manejo de determinadas habilidades sociales e interpersonales requeridas para cooperar, y el procesamiento o reflexión sobre el trabajo del grupo” (Díaz Barriga, 2006:54-55), estas 5 características intervendrán de manera significativa en la evaluación no solo de la manera en que los actores cooperan sino en general en esta idea de evaluación.
Así que una propuesta de evaluación sobre un modelo de gestión colaborativo que incluye la planeación didáctica y la formación docente deberá también retomar esos 4 puntos de la tesis de Carbajosa como la de Díaz barriga, en este sentido esta propuesta no es ajena a los 6 puntos que propone Díaz barriga : ”1. La demarcación del objeto o situación que se ha de evaluar: identificación de los objetos de evaluación; 2. El uso de determinados criterios para orientar la evaluación y de indicadores para realizarla; 3. Una cierta sistematización mínima necesaria para la obtención de la información; 4. A partir de la obtención de la información, y a través de la aplicación de las técnicas, será posible construir una representación lo más fidedigna posible del objeto de evaluación; 5. La emisión de juicios; 6. La toma de decisiones”(Díaz Barriga, 2010:308-309), todos ellos necesarios para tener un balance claro del proyecto.

Proponemos el siguiente esquema para la evaluación de nuestro proyecto:
Titulo: “La construcción de la planeación didáctica en la escuela secundaria a partir de un modelo de gestión colaborativo de formación docente”
Aspecto Descripción Evaluación
1.demarcar el objeto (2 sesiones)
Buscando que se lleve a cabo en el espacio del consejo técnico Presentación del proyecto a la comunidad docente.
Invitación a los docentes
Integración del equipo
Asignación de funciones para cada integrante La autorreflexión es un elemento importante en la comunidad con la exposición de razones sobre las conveniencias de participación
2. Uso de criterios para orientar la evaluación y de indicadores para realizarla. (sesión 3) En base a los propósitos del proyecto se determinara con base en la colaboración de todos sin imposiciones las estrategias de evaluación y los indicadores respectivos cuidando que consideren la autoevaluación y la autocritica. Una manera de llevarla a cabo puede ser el registro de observación por los mismos integrantes utilizando recursos tecnológicos. La sistematización de estos registros pueden ser importantes para la documentación de la experiencia pero debe ser consensuada con los participantes
3. Una sistematización mínima para obtener información (sesión 4) Recabar la información del impacto del proyecto en los docentes y en los alumnos. Utilizar entrevistas de maestro a maestro, de alumno a alumno así como registros de observación para conocer la opinión de los actores Además de los instrumentos señalados, la revisión de los planes de clase de los docentes puede servir para tener una evaluación parcial con estos instrumentos
4. Representación del objeto de evaluación (sesión 5) La autorreflexión y autocritica docente como un espacio abierto en la sesión de colaboración encaminada a valorar la creación de nueva teoría construida por ellos mismos o al menos la reflexión sobre los cambios que han visto reflejados en su persona Un registro sobre las representaciones de los docentes puede dar cuenta de los cambios que se han llevado a cabo
5. Emisión de juicios y toma de decisiones. Se hace una valoración profunda sobre el proyecto, los cambios que se dieron, las tensiones surgidas, los conflictos generados. El balance de cada integrante Se prepara un guion de evaluación que promueva la reflexión y la crítica de los participantes con igualdad de valor en los juicios. Se registran mediante registros electrónicos (grabadora de voz, videograbadora) y de observación. Se reflexiona en qué nivel se desarrolló el proyecto y se plantea un nuevo proyecto o la continuación del anterior de acuerdo a esta evaluación.

He tenido la oportunidad de afirmar que muchos de los problemas de los centros escolares tienen que ver con la escasa comunicación entre los docentes sean directivos, orientadores o maestros frente a grupo. No puede pensarse en colaboración si no hay comunicación, es una buena razón para llevar a cabo este proyecto
Bibliografía
-Diaz Barriga Arceo, Frida. (2006). La conducción de la enseñanza mediante proyectos situados. En enseñanza situada: vinculo entre la escuela y la vida. Mexico: McGraw-Hill Interamericana. Pp. 29-59
-Diaz Barriga, Frida y Gerardo Hernández (2010). Constructivismo y evaluación educativa. En: Estrategias docentes para un aprendizaje significativo. México, Mc Graw-Hill.
-Carbajosa, Diana. (2011). Aspectos criticos de los metodos de evaluacion cualitativa, En Pensamiento crítico en educación. Mexico, D.F.: UNAM-Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educacion.Pp.365-373