Planteamiento de lectura No. 12 La investigación-acción II

De acuerdo con Schön ser un docente investigador de su propia praxis se alcanzaría si se consiguieran las siguientes metas:
1.” Formar y desarrollar un docente reflexivo en la acción y en la cotidianeidad del aula de clases.
2. Vincular la teoría y la práctica del docente con el fin de buscar soluciones a problemas educativos.
3. Reducir el espacio entre aquellos que producen el conocimiento y aquellos que lo aplican.
4. Promover al docente como sujeto y objeto de la producción de conocimiento práctico derivado de sus experiencias en el aula;
5. Promover una imagen del docente mas compenetrada con su realidad y su práctica”( Miguélez, 2010: 31), si observamos bien estas cinco metas nos remiten al menos a tres asuntos en si mismos muy escabrosos desde el punto de vista crítico, a saber, la reflexión docente, la relación teoría- practica y la producción de conocimiento.
Posiblemente todo el mundo sepa que en este siglo XXI, la producción de conocimiento se desarrolla además de las universidades, en las grandes empresas que han creado grandes centros de investigación con laboratorios y tecnología que son producto de las innovaciones tecnológicas más actuales e importantes. Este desplazamiento de la investigación científica a las empresas privadas ha originado una férrea y nueva forma de competencia en el mundo capitalista que prevalece hoy día, de tal manera que esta concentración de la investigación y el conocimiento para las empresas significa la utilización del saber para incrementar sus capitales.
En este mundo capitalista dominado por las grandes corporaciones privadas, el maestro se constituye –al menos pretende dicen algunos- en una especie de tablita de salvación, dado que desde hace mucho existe y sigue dominando el escenario aquella teoría que ve cierta correspondencia entre la educación y el desarrollo de un país; incluso cuando se habla en términos de evaluación educativa son muchas las voces críticas del papel del maestro en el escaso “buen resultado” de la educación, por ello asignan nuevas tareas al maestro pues se pone en tela de juicio cuando no sus métodos, su preparación, su falta de actualización, su organización gremial o las huelgas o paros que hace dejando sin clases “a miles de alumnos”.
¿En efecto el maestro es esa tablita de salvación?. En el ambiente político muy pocos de sus actores –líderes políticos- se atreverían a señalar lo contrario sobre todo si sirve a la captación de votos. Pero ¿Y el maestro también se visualiza como tablita de salvación? Y en todo caso ¿Qué es lo que salvaría?.
No pocos investigadores, entre ellos Pérez acepta en el maestro esa capacidad para mejorar las cosas a través de la investigación acción, en este sentido reconoce en la investigación acción, un tipo de investigación orientada a la praxis, que pretende guiar, corregir y evaluar las decisiones y acciones, creando un clima de cambio y mejora en la realidad educativa.
Es difícil, poder determinar qué papel juegan los maestros en esa lucha por el control de los capitales, posiblemente tengamos que jugar un papel más modesto pero critico del orden capitalista vigente, en este sentido la visión más pedagógica del actuar docente, aquella que mira hacia las prácticas sociales cotidianas en la escuela nos hagan pensar en que nuestro papel lleva otro derrotero.
Si para la investigación –acción se requiere que los maestros sean auto reflexivo, puedan desarrollar una concepción integrada de la teoría y la práctica y sean productores de conocimiento, el enfoque teórico-metodológico de la investigación en la acción parece ser una opción marcada por la acción directa. Esto quiere decir, si se acepta el criterio de que hoy esta ganándole terreno a la simple investigación, que los procesos de formación de los docentes pueden ser más efectivos a través de que reflexionen, critiquen e incidan en sus prácticas educativas para hacerlas mejores en todos los sentidos. Desconozco si en efecto la investigación-acción puede ser la solución a los diferentes problemas de la educación y la sociedad capitalista. El proyecto que estamos creando nos dirá si es posible o no, considero que sí debemos de darnos la oportunidad de formarnos como investigadores en la acción de nuestra practica, solo haciéndola o siendo testigos, participes, colaboradores o lectores de estas experiencias podemos comprender nuestra realidad compleja.