LA AVENTURA DE INNOVAR
Página 1 de 1.
LA AVENTURA DE INNOVAR
La lectura corresponde a la primera parte del libro y hace mención de la “necesidad” de transformar o mejor dicho innovar a la educación. Se ha argumenta por un lado que la educación no cumple con su papel de formadora de individuos en un carácter integral y que se ha reducido a formar sólo académicamente, dejando de lado aspectos importantes como las inteligencia ética y emocional. Por otra parte también se considera que al inicio del siglo XX la educación se ve trastocada por otros ámbitos como el económico y político; el neoliberalismo económico como el sistema económico hegemónico que trae como consecuencia la globalización no solo económica sino, política y hasta cultural tiene influencia en las políticas educativas que se han orientado a la reducción de la participación del Estado en la educación. Cabe mencionar que una de las características de la globalización es el debilitamiento del “Estado benefactor” y siguiendo este orden de ideas se considera que está en peligro la escuela pública. También se menciona los cambios abruptos en los conocimientos, una vez que se ha cuestionado la certidumbre epistemológica que respaldaba los contenidos escolares.
Ante todos estos planteamientos el autor considera que: primero si bien es cierto que el neoliberalismo y la globalización influyen en los procesos educativos, también es verdad que éstos no son determinantes, porque la educación va más allá de ser un mecanismos de reproducción social, sino también u espacio de transformación y resistencia. No existe tal relativismo que se pregona desde el pensamiento posmoderno, pues según el autor: “ Hay suficientes conocimientos, verdades, objetivos y valores educativos – contrastados por evidencias y experiencias- que nos proporcionan certezas racionales y morales…”.
Se hace la diferencia entre cambio, reforma, modernización e innovación que aunque algunas ocasiones se mal emplean utilizándolos como sinónimos, estos no significan lo mismo. Una reforma educativa no necesariamente implica un cambio y hacer cambios no requiere necesariamente innovar, aunque una innovación sí necesita de un cambio.
En muchas ocasiones se considera que una reforma y mejora van de la mano o son la misma cosa, sin embargo se puede dar una mejora sin que haya una reforma puesto que ésta última afecta al sistema educativo en su totalidad y la mejora puede darse en espacios más pequeños y de forma aislada como un aula de clases.
Innovación tampoco significa modernizar, la modernización está relacionada con cuestiones físicas como son los espacios y mobiliario, en este sentido los cambios sólo son aparentes, igual que cuando se cambia el nombre a las cosas utilizando un nuevo discurso sin que por ello se modifique las prácticas. Todo esto no es innovar en tanto que para que se dé una verdadera innovación hace falta que se modifiquen en su totalidad las concepciones de enseñanza y aprendizaje que se encuentran incrustadas dentro de toda una cultura escolar. Por lo anterior una innovación necesita de cambios impulsados por los profesores, son ellos en primera instancia los que han de propiciar las innovaciones, de tal forma que una innovación es un movimiento de cambio que se da de abajo hacia arriba y que logré involucrar a todo el sistema escolar. Además las innovaciones propuestas deben ser institucionalizadas.
En este sentido es indispensable que las administraciones tomen en cuenta y den reconocimiento a todos las aportaciones que se originan en la base, es decir dentro del aula o la escuela. Se necesita que desde la política educativa se deje de ver al profesor como técnico aplicador de reformas y se le dé mayor libertad de acción para la renovación pedagógica.
Para que los profesores sea un agente innovador no basta sólo con buenas intenciones e intentos aislados, sino que se requiere de un equipo docente sólido y con intenciones de cambio y no sólo en una escuela sino que se abarque una zona escolar. También es necesario que reciba apoyos externos por parte de colaboradores críticos o intercambios con profesores de otros lugares.
Como son los profesores los protagonistas de la innovación, también algunas actitudes de ellos pueden ser un obstáculo para la misma por ejemplo falta de cooperación en trabajo de grupo, es decir individualismo, pesimismo o malestar, resistencia al cambio o demasiado apego a sus rutinas.
COMENTARIO
Considero que este texto se relaciona o más bien se complementa con la lectura de Shulman (1998) en el sentido que Carbonell hace hincapié en que las verdaderas innovaciones deben de ser originadas por los docentes en la práctica diaria, sin embargo no surgen de ocurrencias, sino de propuestas sustentadas y estructuradas. Así el profesor requiere de elementos teóricos para poder implementar nuevas prácticas de enseñanza y es justo eso lo que nos brinda Shulman.
Carbonell primero nos refiere que los docentes no debemos esperar que los reformadores o las investigaciones universitarias provengan las soluciones a nuestros problemas, ello no significa que el profesor estará en contra de las propuestas oficiales, sin embargo es necesario que haga una adecuación según sus propias necesidades.
CONSECUENCIAS PARA EL TRABAJO DEL PROFESOR
El artículo aborda de manera detallada sobre las actividades que el docente ha de realizar, si es que se pretende educar en competencias. Para educar en competencias, menciona el autor, no solo basta cambiar las actividades sino que es necesario que el docente modifique su relación con el conocimiento, con los alumnos, con los contenidos e incluso su propia identidad en relación al ser docente.
Se hace una diferencia específica en cuanto al quehacer docente en una educación academicista, en donde el profesor es el que enseña y el objetivo es que el alumno adquiera conocimientos por sí mismos. En una educación por competencias el profesor es considerado un capacitador, se debe “pasar de la lógica de la enseñanza a la lógica de la capacitación” (Perrenoud, 2006; 5). El profesor no enseña sino crea situaciones- problema que aumenten la posibilidad de aprendizaje. En este sentido el objetivo no es sólo la adquisición de conocimientos, sino la movilización de los mismos, es decir el conocimiento es sólo un recurso o herramienta para la solución de problemas. Algunos profesores consideran que el alumno primero ha de apropiarse de los conocimientos y después aplicarlos, sin embargo esto no es así, el alumno se apropia del conocimiento al enfrentarse a un problema real. “Se trata de aprender a hacer lo que no se sabe hacer, haciéndolo”
En resumen para que el profesor cambie su relación con los saberes y pueda movilizarlos debe: dar importancia a la relación pragmática con el saber, es decir, comprender que los saberes están anclado siempre a la acción. La acción implica incompletud y desorden por lo tanto el profesor no se puede anticipar porque desconoce el rumbo de la acción. Renunciar al protagonismo y dejar de considerar que el alumno asimilará los conocimientos en la misma forma como él los ha organizado y por último debe ser capaz de movilizar sus propios saberes.
Como ya se mencionó con anterioridad el trabajo escolar debe estar encaminado a la solución de situaciones- problema el alumno sólo se formará en competencias si se enfrenta a problemas numerosos complejos y realistas. Al enfrentarse a un problema el alumno debe tomar una serie de decisiones para lograr el objetivo que él mismo se ha propuesto o que se le ha asignado. La creación de situaciones- problema no solo es responsabilidad del profesor, éste debe ser apoyado desde las políticas educativas para que se propicien la creación de materiales que estén orientados desde la educación por competencia, es necesario que las compañías editoras proporciones materiales en los que puede apoyarse el profesor.
Es necesario mencionar que un problema no se resuelve desde un área de conocimiento o disciplina, en tanto en él intervienen múltiples factores. Así se debe dejar de lado el apego a los programas tradicionales en donde las disciplinas estás seccionadas. La solución de problemas demanda de un trabajo interdisciplinario en donde si no es posible que el profesor conozca de todas las disciplinas, bien puede dialogar con sus colegas y estar en la disposición de aprender de ellos.
Por otra parte debe dejar de lado la intención de abarcar la totalidad de contenidos de los programas ya que el enfoque por competencia lleva a poner énfasis en menos cosas pero más sólidas y fecundas. Así que el profesor no debe estar angustiado por cubrir el programa al cien por ciento.
El profesor se enfrentará a la resistencia de los alumnos, puesto que estos no están formados para la solución de problemas y les resulta más fácil el trabajo académico de acumulación de conocimientos. Sin embargo si el profesor no se deja impactar por la idea de resistencia de los alumnos y está convencido de las transformaciones que conlleva el enfoque por competencias, entonces habrá de negociar con los alumnos y lograr que acepten un contrato didáctico que respete su persona y sus opiniones.
• El enfoque por competencias genera en los alumnos los siguientes aspectos, mismos que tendrán que tomarse en cuenta para ser evaluados:
• Implicación; que el alumnos este interesado en afrontar obstáculos verdaderos y requiere el despliegue de imaginación, ingenio, ideas, etc.
• Transparencia; porque no solo se atiene a los resultados, sino que el trabajo se observa en todo el proceso.
• Cooperación; exige que el alumnos sea colaborador y no sólo haga el trabajo en solitario.
• Tenacidad; Los resultados de sus actividades no son inmediatos, sino a largo plazo.
• Responsabilidad; en el sentido que el trabajo del alumno está íntimamente relacionado con el de sus compañeros e incluso afecta a personas ajenas al sistema escolar de tal forma que el alumno adopta un compromiso no sólo consigo mismo sino con los demás.
COMENTARIO
Hasta aquí se han expuesto las ideas del autor en torno a las prácticas docentes en el enfoque por competencias. Dicho enfoque me parece interesante y adecuando tal como se señala en el artículo Sin embargo dicho enfoque ha sido objeto de múltiples críticas en cuanto a la formación integral de los alumnos y está es la mirada que ha prevalecido en las lectura que he hecho al respecto.
Me parece adecuado cuando se menciona que un erudito que no moviliza los conocimientos, éstos le son inútiles y no estoy en contra de la movilización de los conocimientos, sino mi pregunta es qué pasa con esos contenidos que de dejan de lado porque no son “importantes” para la solución del problema al que el alumno se está enfrentando.
No me quedó muy clara la diferencia entre saberes pragmáticos y saberes utilitaristas.
No entiendo qué pasa con aquellos conocimientos que no resuelven situaciones -problemas que son reales como por ejemplo las artes o la Filosofía.
[justify]
Ante todos estos planteamientos el autor considera que: primero si bien es cierto que el neoliberalismo y la globalización influyen en los procesos educativos, también es verdad que éstos no son determinantes, porque la educación va más allá de ser un mecanismos de reproducción social, sino también u espacio de transformación y resistencia. No existe tal relativismo que se pregona desde el pensamiento posmoderno, pues según el autor: “ Hay suficientes conocimientos, verdades, objetivos y valores educativos – contrastados por evidencias y experiencias- que nos proporcionan certezas racionales y morales…”.
Se hace la diferencia entre cambio, reforma, modernización e innovación que aunque algunas ocasiones se mal emplean utilizándolos como sinónimos, estos no significan lo mismo. Una reforma educativa no necesariamente implica un cambio y hacer cambios no requiere necesariamente innovar, aunque una innovación sí necesita de un cambio.
En muchas ocasiones se considera que una reforma y mejora van de la mano o son la misma cosa, sin embargo se puede dar una mejora sin que haya una reforma puesto que ésta última afecta al sistema educativo en su totalidad y la mejora puede darse en espacios más pequeños y de forma aislada como un aula de clases.
Innovación tampoco significa modernizar, la modernización está relacionada con cuestiones físicas como son los espacios y mobiliario, en este sentido los cambios sólo son aparentes, igual que cuando se cambia el nombre a las cosas utilizando un nuevo discurso sin que por ello se modifique las prácticas. Todo esto no es innovar en tanto que para que se dé una verdadera innovación hace falta que se modifiquen en su totalidad las concepciones de enseñanza y aprendizaje que se encuentran incrustadas dentro de toda una cultura escolar. Por lo anterior una innovación necesita de cambios impulsados por los profesores, son ellos en primera instancia los que han de propiciar las innovaciones, de tal forma que una innovación es un movimiento de cambio que se da de abajo hacia arriba y que logré involucrar a todo el sistema escolar. Además las innovaciones propuestas deben ser institucionalizadas.
En este sentido es indispensable que las administraciones tomen en cuenta y den reconocimiento a todos las aportaciones que se originan en la base, es decir dentro del aula o la escuela. Se necesita que desde la política educativa se deje de ver al profesor como técnico aplicador de reformas y se le dé mayor libertad de acción para la renovación pedagógica.
Para que los profesores sea un agente innovador no basta sólo con buenas intenciones e intentos aislados, sino que se requiere de un equipo docente sólido y con intenciones de cambio y no sólo en una escuela sino que se abarque una zona escolar. También es necesario que reciba apoyos externos por parte de colaboradores críticos o intercambios con profesores de otros lugares.
Como son los profesores los protagonistas de la innovación, también algunas actitudes de ellos pueden ser un obstáculo para la misma por ejemplo falta de cooperación en trabajo de grupo, es decir individualismo, pesimismo o malestar, resistencia al cambio o demasiado apego a sus rutinas.
COMENTARIO
Considero que este texto se relaciona o más bien se complementa con la lectura de Shulman (1998) en el sentido que Carbonell hace hincapié en que las verdaderas innovaciones deben de ser originadas por los docentes en la práctica diaria, sin embargo no surgen de ocurrencias, sino de propuestas sustentadas y estructuradas. Así el profesor requiere de elementos teóricos para poder implementar nuevas prácticas de enseñanza y es justo eso lo que nos brinda Shulman.
Carbonell primero nos refiere que los docentes no debemos esperar que los reformadores o las investigaciones universitarias provengan las soluciones a nuestros problemas, ello no significa que el profesor estará en contra de las propuestas oficiales, sin embargo es necesario que haga una adecuación según sus propias necesidades.
CONSECUENCIAS PARA EL TRABAJO DEL PROFESOR
El artículo aborda de manera detallada sobre las actividades que el docente ha de realizar, si es que se pretende educar en competencias. Para educar en competencias, menciona el autor, no solo basta cambiar las actividades sino que es necesario que el docente modifique su relación con el conocimiento, con los alumnos, con los contenidos e incluso su propia identidad en relación al ser docente.
Se hace una diferencia específica en cuanto al quehacer docente en una educación academicista, en donde el profesor es el que enseña y el objetivo es que el alumno adquiera conocimientos por sí mismos. En una educación por competencias el profesor es considerado un capacitador, se debe “pasar de la lógica de la enseñanza a la lógica de la capacitación” (Perrenoud, 2006; 5). El profesor no enseña sino crea situaciones- problema que aumenten la posibilidad de aprendizaje. En este sentido el objetivo no es sólo la adquisición de conocimientos, sino la movilización de los mismos, es decir el conocimiento es sólo un recurso o herramienta para la solución de problemas. Algunos profesores consideran que el alumno primero ha de apropiarse de los conocimientos y después aplicarlos, sin embargo esto no es así, el alumno se apropia del conocimiento al enfrentarse a un problema real. “Se trata de aprender a hacer lo que no se sabe hacer, haciéndolo”
En resumen para que el profesor cambie su relación con los saberes y pueda movilizarlos debe: dar importancia a la relación pragmática con el saber, es decir, comprender que los saberes están anclado siempre a la acción. La acción implica incompletud y desorden por lo tanto el profesor no se puede anticipar porque desconoce el rumbo de la acción. Renunciar al protagonismo y dejar de considerar que el alumno asimilará los conocimientos en la misma forma como él los ha organizado y por último debe ser capaz de movilizar sus propios saberes.
Como ya se mencionó con anterioridad el trabajo escolar debe estar encaminado a la solución de situaciones- problema el alumno sólo se formará en competencias si se enfrenta a problemas numerosos complejos y realistas. Al enfrentarse a un problema el alumno debe tomar una serie de decisiones para lograr el objetivo que él mismo se ha propuesto o que se le ha asignado. La creación de situaciones- problema no solo es responsabilidad del profesor, éste debe ser apoyado desde las políticas educativas para que se propicien la creación de materiales que estén orientados desde la educación por competencia, es necesario que las compañías editoras proporciones materiales en los que puede apoyarse el profesor.
Es necesario mencionar que un problema no se resuelve desde un área de conocimiento o disciplina, en tanto en él intervienen múltiples factores. Así se debe dejar de lado el apego a los programas tradicionales en donde las disciplinas estás seccionadas. La solución de problemas demanda de un trabajo interdisciplinario en donde si no es posible que el profesor conozca de todas las disciplinas, bien puede dialogar con sus colegas y estar en la disposición de aprender de ellos.
Por otra parte debe dejar de lado la intención de abarcar la totalidad de contenidos de los programas ya que el enfoque por competencia lleva a poner énfasis en menos cosas pero más sólidas y fecundas. Así que el profesor no debe estar angustiado por cubrir el programa al cien por ciento.
El profesor se enfrentará a la resistencia de los alumnos, puesto que estos no están formados para la solución de problemas y les resulta más fácil el trabajo académico de acumulación de conocimientos. Sin embargo si el profesor no se deja impactar por la idea de resistencia de los alumnos y está convencido de las transformaciones que conlleva el enfoque por competencias, entonces habrá de negociar con los alumnos y lograr que acepten un contrato didáctico que respete su persona y sus opiniones.
• El enfoque por competencias genera en los alumnos los siguientes aspectos, mismos que tendrán que tomarse en cuenta para ser evaluados:
• Implicación; que el alumnos este interesado en afrontar obstáculos verdaderos y requiere el despliegue de imaginación, ingenio, ideas, etc.
• Transparencia; porque no solo se atiene a los resultados, sino que el trabajo se observa en todo el proceso.
• Cooperación; exige que el alumnos sea colaborador y no sólo haga el trabajo en solitario.
• Tenacidad; Los resultados de sus actividades no son inmediatos, sino a largo plazo.
• Responsabilidad; en el sentido que el trabajo del alumno está íntimamente relacionado con el de sus compañeros e incluso afecta a personas ajenas al sistema escolar de tal forma que el alumno adopta un compromiso no sólo consigo mismo sino con los demás.
COMENTARIO
Hasta aquí se han expuesto las ideas del autor en torno a las prácticas docentes en el enfoque por competencias. Dicho enfoque me parece interesante y adecuando tal como se señala en el artículo Sin embargo dicho enfoque ha sido objeto de múltiples críticas en cuanto a la formación integral de los alumnos y está es la mirada que ha prevalecido en las lectura que he hecho al respecto.
Me parece adecuado cuando se menciona que un erudito que no moviliza los conocimientos, éstos le son inútiles y no estoy en contra de la movilización de los conocimientos, sino mi pregunta es qué pasa con esos contenidos que de dejan de lado porque no son “importantes” para la solución del problema al que el alumno se está enfrentando.
No me quedó muy clara la diferencia entre saberes pragmáticos y saberes utilitaristas.
No entiendo qué pasa con aquellos conocimientos que no resuelven situaciones -problemas que son reales como por ejemplo las artes o la Filosofía.
[justify]
Laura Millán Lara- Mensajes : 11
Fecha de inscripción : 01/10/2011
Página 1 de 1.
Permisos de este foro:
No puedes responder a temas en este foro.